jueves, 27 de agosto de 2020

La Guerra Polaco Sovietica IV

Los rusos habian avanzado en poco mas de un mes tanto en Polonia que ahora estaban a las puertas de la capital. Un caramelo que parecian tener en sus manos. En esta entrega, veremos que paso con los rusos y porque no lograron entrar victoriosos en Varsovia


La Guerra Polaco sovietica

El milagro

El impulso ruso de Julio parecía que iba perdiendo ahora fuerza, mientras había arrasado durante un mes en todos los frentes que tenia con Polonia, al comienzo de agosto todo parecía ralentizarse. Buddiony que se había propuesto liberar Galitzia de los burgueses polacos se encontraba parado en su esfuerzo por las defensas polacas. Una de las causas del parón se debía a las largas líneas logísticas del Ejercito Rojo. Para el 1 de agosto se calcula que la cifra de personas en el ejército era de 1 millón. Pero de ellos, solo los 355.000 destinados a Galitzia y los 402.000 eran considerados boyets, es decir, hombres para luchar, el resto, eran yedoki o bocas, es decir, intendencia y de ellos dependían todo. El problema era atravesar toda la llanura rusa hasta Polonia en tiempo para llevar los suministros y comida, y esta no estaba llegando a tiempo siempre.
Pero tampoco iba bien en la faceta política, el Polrevkom estaba fracasando, y es que estaba teniendo mucha resistencia por parte de la población civil para asentarse. Lenin llego a telegrafiar que si hacia falta se destruyera propiedades de manera agresiva y que debían hacer más caso a Dzierzynski, el cual no convenció a sus compañeros para que hicieran caso a Lenin. La oposición a la colectivización de la tierra preocupaba a Dzierzynski, el cual quería abordarla una vez estuvieran ya Varsovia instalados


¡Campesino! El terrateniente polaco te quiere esclavizar. ¡Eso nunca ocurrirá!

Sin embargo no todo eran malas noticias para los rusos, el propio Dzierzynski escribiría a Lenin sobre la situación a sus ojos de la situación antes del salto definitivo a la toma de Varsovia, el punto que según los rusos haría ya terminar la guerra:
“Los agricultores están alejados de la guerra y se resisten a la movilización. Las masas trabajadoras de Varsovia están esperando la llegada del Ejército Rojo, debido a la falta de liderazgo y el reino de terror no están actuando activamente. El partido Socialista esta llevando a cabo agitaciones para la defensa de Varsovia. Hombres y mujeres están siendo reclutados por millares para trabajar en las defensas. Se está usando alambre de espino y hay rumores de barricadas en las calles. Para aumentar el temperamento guerrero de la población, los polacos han lanzado una avalancha de llamamientos, en los que dicen que de un poderoso golpe será suficiente para repeler al cansados y debilitado Ejército Rojo. Se han formado brigadas de choque por mujeres. Los voluntarios, son principalmente los hijos mimados de la burguesía y la inteligencia, se están comportando desesperadamente.
En general, en los círculos gobernantes hay un ambiente de depresión. Los artículos e los periódicos sobre el comportamiento de la Entente están llenos de ironía y reproche. Todos los cardenales, arzobispos y obispos polacos han pedido ayuda al episcopado del mundo entero, describiéndonos como anticristo”.

Tukhachevsky estaba muy contento sobre la marcha de sus planes, ya que todo estaba yendo tal cual planeo. A pesar de todo, tenía sus dudas en cuanto a un elemento que no estaba del todo completo en su hoja de ruta, y es que el ejercito polaco en la línea de defensa entre los ríos Bug y Bezarina no fue destruido. Su plan se podía ver frenado porque si todo hubiera ocurrido tal cual planeo, ahora disfrutaría de una superioridad numérica que no gozaba al principio de la campaña. A pesar de todo, aun contaba con una ventaja material tanto de terreno como de moral, ya que la de los polacos estaba por los suelos.




La situacion en agosto de 1920

Tukhachevsky que movía sus ejércitos hacia Varsovia, se disponía a atacar por el norte la ciudad, el único problema es que estaba forzando a sus hombres, con marchas a veces de hasta 25 kilómetros diarios. La idea seria tomar la fortaleza de Modlin al norte de la ciudad con el XV ejército y con el III y el XIV atacar la ciudad por la parte este, tomando el actual distrito de Praga. El IV ejercito estaría en el norte y de necesitarlo podría atacar por el norte o rodear la ciudad de necesitarlo.
Lo mas curioso en este plan de batalla es que cuando se acercaban a la ciudad, en la batalla de Chłem en el cadáver de un oficial polaco muerto encontraron el plan de Pilduski para evitar el ataque ruso, pero Tukhachevsky pensó que era demasiado bueno para ser verdad, por lo que decidió seguir con su avance planeado sin ningún cambio. En este plan, Piłduski tenia en cuenta todos los ejércitos menos el IV, lo que hizo pensar sobre una treta al comandante ruso. Se encontraba también ahora Tukhachevsky con el miedo de que Piłsudki pudiera organizar una buena defensa de la ciudad de Varsovia tal como escribiría en sus notas, ya que lo veía como un comandante que gran autoridad y carisma que podía levantar los ánimos de los polacos y hacer más difícil la conquista en caso de que variaran el plan y se enteraran los polacos. Esas fueron algunas de las razones por las que no dio crédito a los planes encontrados que eran los oficiales.

Ayuda, todo para el frente, todos al frente

Por el lado polaco todo estaba pendiente de un hilo, no solo estaban en la última línea de defensa, pues si caía la capital, caería Polonia, sino que el dinero que tenían para rearmarse se había acabado. Los americanos ante la petición de crédito ponían de condición que se usara en fines civiles, los británicos y franceses se excusaban que hasta que no hubiera un buen gobierno en Polonia no darían más dinero. Sin embargo el general Weygand pensó que si no había dinero para comprar, podían acudir a la fuente de las armas que estaría dispuesta a venderlas, para ello buscaron los depósitos de armas alemanas que estaban desmantelándose. Y la idea fue aceptada. La mayoría de los arsenales estaban almacenados en Francia. El material adquirido era más que suficiente al menos para parar la ofensiva sobre la capital según cálculos del alto mando polaco.

La hipocresía de la Liga de las Naciones: “Con una mano ofrece paz a Rusia, con la otra da armas a los polacos”

Pero se presentó un nuevo problema. Los ferroviarios alemanes impidieron la circulación de los trenes por terreno alemán a pesar del visto bueno del gobierno alemán para ello. La vía marítima también fue descartada por la huelga de los estibadores de Danzing. Al final, y tras presiones, diplomáticas y la intervención de la policía alemana y algún que otro freikorp logran que los trenes puedan avanzar.

Otro problema era el de tener manos suficientes para portar las armas. Para ello la Rada Obrony Panstwa llamo al reclutamiento de voluntarios:
“¡La patria os necesita! Todos los buenos hombres capaces de portar armas son llamadas a unirse al ejército. La nación entera debe resistir sólida, como un muro inamovible. Esta en nuestro esfuerzo hacer que la ola de bolchevismo se rompa. Con unidad, concordia, trabajo incesante de todos lograremos el objetivo. ¡Por la victoria! ¡A las armas!”

Cartel aparecido en las calles de Varsovia antes de la batalla: ¡Quienquiera que sea polaco, que se encargue de tu bayoneta!

Antes de la batalla de Varsovia, el reclutamiento tuvo un gran éxito. El partido Socialista polaco formó un batallón de trabajadores para defender la capital, el Robotniczy Pułk Obrony Stolicy. El 4 de agosto, con la formación del comité de defensa de la ciudad, se organizan todos los voluntarios que se presentaron. El único problema de todos estos voluntarios, y que también tenía el ejército, es que la disciplina era pobre. En agosto la deserción se castigaba con la muerte, independientemente del cuerpo al que pertenecieras.

Para la defensa de la ciudad todo se planeo durante la noche del 5 al 6 de agosto. En el palacio de Belvedere, Pilduski recibe al general Rozwadowski, el cual haría ver al general sobre la importancia de usar el rio Wieprz, a 25 kilómetros de Varsovia y en vista de esto, Piłsudki decidirá dejar libre las defensas próximas al rio Bug. A la mañana del 6 de agosto, el propio Rozwadowski firmara la orden 8358/3 con la que se haría el despliegue de las fuerzas polacas para este momento decisivo.

A las armas

La orden del 6 de agosto creaba 3 nuevos frentes, el norte, desde el pueblo de Pułtuck a orillas del rio Narew hasta la localidad de Deblin a orillas del Vístula estaría a las órdenes del General Haller, con un mando sobre 156.000. Cerca de este frente estaría el general Sikorski con el ala izquierda preparada para poder ayudar a Varsovia si fuera necesario. En lo correspondiente a este sector, lo que sería el área de Varsovia, los generales Latinik y Roja, con la reserva del general Zeligowski protegerían el perímetro de la capital.


El general Haller con su ejército azul

El sector central, con 116.000 desde Deblin hasta la localidad de Brody en Galitzia estaría bajo mando directo de Piłsudki. Las fuerzas principales de este sector estarían dirigidas por el general Smigły-Rydz, cubierto por sus alas por los generales Skierski en el sector izquierdo y por la derecha por Zielinski.



La situación de tropas para la batalla

El sector sur, mucho mas disperso que los anteriores, estaría protegido por el sexto ejército del general Jedrzejewski, era el menos numeroso, solo 26.000 que estaba asistido por la caballería del coronel Rommel y el ejercito ucraniano del general Pavlenko. El objetivo de este grupo seria la defensa de Lwów y que el ejercito ruso pudiera unirse a los que pudiera asediar Varsovia. Su mando estaría en la ciudad de Puławy.

El plan de Piłsudki no era malo, pero no tenia en cuanta el despliegue del IV ejército ruso cerca de Varsovia, y es que el problema es que los primeros días de agosto tuvieron un mal tiempo y ninguna de las fuerzas aéreas pudieron despegar para poder reconocer el terreno, por lo que los planes de ataque de ambos ejércitos se hicieron con los informes de la caballería y a la vieja usanza, por lo que no sabían de este ejército. No obstante, el plan era arriesgado, pero es que los rusos hicieron todos los movimientos tal como querían los polacos para que su plan tuviera éxito.

Pero el mayor problema del plan de Piłsudki era el de la organización de las tropas, no solo estaba el factor cansancio y moral, ya que casi todas las tropas estaban cansadas de hacer retiradas y de luchar por casi 5 semanas. Además muchas de ellas debían cambiar su mando y trasladarse entre 150 y 300 kilómetros. El IV ejército polaco fue el que más se movió, desde el norte hasta Puławy para quedar con el mando directo de Piłsudki, que estaba como loco de irse del ambiente opresivo de Varsovia, cosa curiosa porque muchos de sus soldados le veían como la figura que les daba esperanza, sin embargo el se encontraba todos los días con quejas y trabas por parte de los políticos.


Matar al bolchevique

Solo dos días después, el 8 de agosto, Tukhachevsky da la orden para tomar Varsovia. Aquí empezaran un poco los problemas para los rusos, mientras el general Kamenev le pedía cambiar el plan de batalla porque sabía que los polacos se estaban reagrupando pero no donde, pero su sugerencia fue desoída, y mientras, la petición de también Kamenev de que los ejércitos sur fueran transferidos a las órdenes de Tukhachevsky , fueron desoídas también por Stalin y Yevgorov, que estaban al mando de ellos. Stalin argumentaría que Tukhachevsky estaba perdiendo el sentido de la realidad y no estaba planificando bien la campaña y se estaba plegando a las órdenes de Moscú, que no entendía la realidad de la contienda a cientos de kilómetros de donde ocurría. Razón no le faltaría a Stalin.

El día 12 de agosto debía ser el día que Varsovia debería ser tomada según los planes de Tukhachevsky, pero no fue así, pero si el día que ya empezaron los combates. Y todo se libraría en cuatro frentes, cerca de la frontera contra Prusia, los ríos Wkra y Wieprz y el rio Vístula. Por supuesto las defensas mas elaboradas estaban en el último sector, con líneas de trincheras que llegaban a estar a 20 kilómetros de la capital. También eran los mejores armados, con 730 ametralladoras 192 piezas de artillería y una compañía de tanques. Todo ello en un frente de 17 kilómetros de longitud, lo que hacía una concentración de fuego y fuerzas totalmente parecidas a la de las guerra de trincheras de la I Guerra Mundial

Por la tarde de ese día, los primeros combates acontecerán en torno al pueblo de Radzymin, cuando la 21 División del III ejercito llegara a las afueras del pueblo, aunque no será hasta el día siguiente, el 13 de agosto cuando bajo el fuego de artillería polaco los rusos tomen el pueblo. La retirada de los polacos en ese sector hizo creer que los rusos estaban avanzando hacia la capital por ese camino. Haller solicito ayuda, y se le concedió, una serie de refuerzos bastante limitados para que recuperara el pueblo al día siguiente.

El día 13 sin embargo no empezaría muy optimista, los cuerpos diplomáticos de Varsovia son evacuados a Poznan. Los únicos en no abandonar la capital serán los italianos, teniendo ordenes de no abandonar al gobierno polaco, así como el legado papal, que era arzobispo de Lepanto, que tanto el como su cuerpo de ayudantes tenían el pensamiento de que era su deber parar las hordas del anticristo. También se quedó la misión interaliada que aunque manifestó su idea de quedarse, vieron como las ruedas de sus coches fueron pinchadas. El gobierno polaco se quedó, más que nada porque Poznan era territorio del partido de Roman Dmowski, que había sido expulsado de la Rada Obrony Pawnsta, y se temía que pudieran atacar a los miembros del gobierno.


El monstruo bolchevique trae asesinatos, conflicto y destrucción a Polonia. Aquellos que quieran asegurar la paz para la Patria, que se unan a las tropas inmediatamente!

El sector del rio Wkra era el que presentaba mas problemas para su defensa, al general Sikorski se le otorgo un ejercito compuesto de retales de todo tipo, entre sus elementos estarán desde voluntarios que no sabían ni disparar, hasta cañones de la época napoleónica. Tenía también algunas divisiones bastantes mermadas por los combates, y la mejor brigada que tenía, la siberiana del coronel Rumsza, equipada espléndidamente con fusiles americanos y japoneses, estaba cansada de viajar desde ese lugar perdido del mundo para llegar a combatir por Polonia. Sin embargo tenían la ventaja del terreno. El rio Bug alcanzaba aquí hasta 300 metros de anchura en unos terrenos pantanosos difíciles de vadear, además tenían el Vístula a sus espaldas y aunque el Wkra en verano era poco más que un arroyo, su cauce era una trinchera. Además, alrededor de Modlin había 6 fortalezas.

Sin embargo, aunque pudieran parecer los mas débiles decidieron atacar y no esperar al enemigo, el día 14 con la brigada siberiana en punta, vadean el Vístula, y se dirigen a Ciechanów. Aquí cargan contra las tropas rusas en la ciudad, que entran en pánico, queman la estación de radio y dejaran atrás los códigos de encriptado y planes de ataque rusos. El problema del ataque era que Sikorski no sabía de la existencia del IV ejército ruso. También lograra recuperar Radzymin, con una lucha incruenta con combates a bayoneta calada. Sin embargo al final del día, a pesar de tener una posición de ventaja, había partes del ejército polaco en problemas, como los hombres del general Krajowski que estaban rodeados en Płock y los rusos habían tomado puestos claves que les hacían amenazar Modlin.

Trinchera polaca durante la batalla de Varsovia

Las noticias por la tarde del día 14 eran de caos, Haller no sabía del éxito de Sikorski, y todo era pesimismo en la capital. Corrían rumores de que a las afueras de la ciudad se veían ya patrullas de cosacos, lo que solo aumentaba la sensación de descontrol. Haller y Rozwadowski mandan una serie de telegramas a Pilduski para que entrara en acción y les ayudara. Él les contestaría que su ofensiva empezaría en menos de 24 horas. Pilduski creía que su aparición en el campo de batalla descolocaría a los rusos, que ahora se encontraría además en una pinza, por lo que entrarían en pánico. Lo que no sabían los habitantes de la capital era que miembros de la organización del POW habían colocado suministros como munición y granadas para atrapar a los rusos en fuego cruzado en las calles de Varsovia. Pilduski tenía planeado todo para su llegada.

Movimientos de batalla

La noche del 14 fue tensa, y el día 15 es cuando se decidiría todo. Sikorski había resistido pero se encontraba en una mala situación aunque no tan crítica como podía esperarse porque los rusos seguían ignorando su posición. Aunque el 15 por la mañana los rusos vuelven a tomar el pueblo Radzymin, sin embargo el avance es parado y el pueblo es tomado de nuevo por la tarde. El avance ruso para intentar tomar Modlin también será rechazado e incluso en ambos asaltos se usan tanques para parar a los bolcheviques.. En la población cercana de Minsk Mazowiezki los rusos son rechazados el día 15 de entrar en la ciudad. Esa noche fue relativamente tranquila, no hubo ningún ataque y la inteligencia polaca no informaba de movimientos inesperados para atacarlos.

Corría el rumor entre las filas polacas que se había aparecido la Virgen para ayudarles, lo que si era verdad es que la moral polaca había cambiado, cosa que notaban los rusos, en su diario el comandante de la 27 división de rifles de Omsk, Viktov Putvna, escribía que la moral polaca y su actitud no era la misma que la mañana, cuando estaba por los suelos. También es verdad que había ocurrido el famoso hecho de la muerte del cura Ignacy Skorupka. Que fue muerto cuando crucifijo en mano dirigía una carga de polacos contra los rusos. Su muerte fue usada por la propaganda polaca, y tuvo éxito, porque dio ánimos a los soldados. También está la situación de la radio rusa, la obtención de las claves por la inteligencia polaca les permitió no solo obtener información de sus movimientos sino que al hacer emisiones siempre a las mismas horas boicoteaban las trasmisiones rusas con audios del génesis en latín y aves maría.

Al día siguiente en una comunicación entre Sikorski y Haller y Rozwadowski estos dos últimos le piden que se retire. Sin embargo Sikorski les dice que no, aunque la posición que tenía era mala y la defensa del rio Wrka era muy débil, sostenía que era lo mejor quedarse en sus puestos, ya que si se movería, haría que los ejércitos rusos fueran tras el para aniquilarlo. Él podía parar al ejército más cercano, el III. Esa misma mañana Sikorski atacara a las filas rusas. Mientras, por detrás, Modlin era atacada por los rusos, causándoles graves problemas para defenderlo. Sin embargo los rusos estaban desesperados y lograrían hacerse con la fortaleza pero a costa de muchas bajas.

Un poco mas al norte, en Płonsk, los polacos intentaban defender la ciudad, con la presencia de solo unos pocos voluntarios de Pomerania y un grupo de marineros parecía que era cuestión de tiempo que cayeran en manos del IV ejército ruso. Sin embargo, a pesar del aviso de ayuda de Sikorski no tenían muchas esperanzas. Cuando los primeros ataques estaban produciéndose, la llegada del primer regimiento de caballería ligera hizo que los rusos huyeran de la ciudad. Aun así se produjo algún combate entre las caballerías en la plaza del mercado de la ciudad dando lugar a una imagen bastante curiosa.


Solo el ejército lograra salvar el país

A pesar de la defensa exitosa de Płonsk, la situación seguía siendo mala. Si los rusos se rehacían y contraatacaban harían que tuvieran que retirarse y ello provocaría una masacre. La ayuda debería venir de tres divisiones que aun estaban frescas, su único problema, en palabras del primer ministro Wytos era: “muchos de estos soldados no tienen siquiera un uniforme completo, solo una chaqueta o una camisa que no suele ser de su talla. Están no obstante todos bien armados, y charlan animadamente y se muestran confiados en la victoria. Solo se quejan de que no tienen calzado y que algunos han caminado desde Kiev descalzos, y algunos solo tienen una tira de cuero como calzado. Muchos tienen los pies en sangre y con llagas supurantes”.


Grupo de voluntarios polacos

A pesar de todas las dificultades, la ayuda de estas tres divisiones fue decisiva, que junto con la llegada de la 17 división de Poznan, hicieron que el ejercito ruso al final tuviera que retirarse y así quedar ya Płonsk salvada. Tukhachevsky escribiría: “Parecía que el destino del V Ejercito polaco estaba sellado. Su destrucción tendría un efecto decisivo en todas las operaciones. Pero los polacos son afortunados. Su V ejercito se salvó. Con completa impunidad y con sus flancos amenazados por cuatro divisiones de infantería y dos de cosacos. Y ahora atacan a nuestro XV y III Ejércitos. Es monstruoso pensar que es lo que ha ayudado a los polacos, no solo a avanzar entre ambos ejércitos, sino también a expulsarlos” La suerte es un factor que influye en las batallas, y a Tukhachevsky se le parecía acabar ahora tan cerca de la presa que queria cazar.

Y mientras, Piłsudki que desde su cuartel de Puławy estaba al tanto de todo lo que ocurría en Varsovia. Y como había prometido, se puso en marcha el día 15 con 5 divisiones hacia la capital. La idea era cerrar el cerco contra los rusos, ahora ya era una carrera para ver quien llegaba primero a su objetivo, a escapar del cerco o a cerrarlo. Piłsudki lanzo su propio ataque, comenzando por el rio Wieprz. Con 27500 hombres, 950 jinetes, 461 ametralladoras y 90 piezas de artillería era un refuerzo considerable para expulsar definitivamente a los rusos, y lo hizo de manera eficaz, barriendo los restos de Varsovia que huyeron a la línea que ocupaban desde Chłem hasta Białystock. El avance de Piłsudki se pararía en Luków el 17 de agosto.


Plano de los movimientos finales de la batalla de Varsovia

Una de las razones para el triunfo de las fuerzas polacas es el hecho de la falta de coordinación entre los ejércitos del norte y del sur, así la falta de ayuda de los ejércitos de Budyonny y Tukhachevsky facilita las cosas a los polacos. Trostky escribiría que Stalin no podía tolerar el éxito de Tukhachevsky y quería entrar en Lwów al mismo tiempo que se tomaba Varsovia, según él, Stalin estaba librando su propia guerra. Sin embargo Stalin entendió la guerra mucho mejor que los miembros del Politburo en Moscú y Trostky o Tukhachevsky. Lo que el georgiano entendió era que el frente sur era algo secundario, lo que importaba era la defensa de Rusia y su revolución y proteger y anexionar Ucrania, autentico granero de Rusia. La batalla de Brody el 29 de julio con bastantes bajas y con unas líneas de suministro bastantes largas le hizo ver que todo debería ser tomado y asentado con tiempo y que Polonia podía esperar y lo que paso los días siguientes lo demostró.

Con el frente sur parado, el resultado de todas las operaciones de los días 12 al 18 de agosto fue el alejar el peligro ruso de Varsovia y devolver la guerra al frente cercano a la frontera con Prusia. La invasión a Polonia había sido rechazada. Lo peor de los rusos es que habían perdido 66000 soldados como prisioneros de los polacos y 44000 cruzaron la frontera con Prusia para ser internados en Alemania, unas pérdidas que no podían ser recuperadas. Además las líneas de aprovisionamiento tal como se quejaba Stalin eran largas e ineficientes, el ejército se encontraba cansado y el no ver la victoria de tomar Polonia era un golpe moral muy duro para los rusos y estaban ahora psicológicamente en el punto opuesto de cuando comenzó julio.

Banderas sovieticas capturadas en la batalla

Otro de los factores de la victoria polaca, así como de la consiguiente estrategia de ataque, es que los polacos lograron interceptar comunicaciones de radio, y no solo descifrarlas y también interferir en ellas. Muchas veces mandaban mensajes cifrados con instrucciones erróneas, o volvían a usar claves antiguas, que el receptor del mensaje no conservaba ya y no podía descifrar. . Por supuesto, esto son cosas para excusar el fallo de Tukhachevsky. El único que con el tiempo defendió al general ruso fue Trostky, pero solo con el ánimo de atacar a Stalin. Pero también hay que decir que Tukhachevsky hizo punto por punto lo que los polacos, y especialmente Piłsudki pensaban que haría y por eso también lograron derrotarlo.

Sin embargo el general polaco tampoco se libró de las críticas, la principal era, y sigue siendo, que el plan no fue diseñado por el. Aunque en realidad, la ayuda aliada en la semana previa a la batalla de Varsovia estaban más preocupados en si deberían de evacuar el país ante lo que parecía la caída más que previsible de la capital. El embajador británico recibió la negativa directa de Lloyd de no abandonar la ciudad. Llegando a decir que: “no sé quién me disgusta más, si los polacos, los bolcheviques o Lloyd George”. En cuanto a la misión interaliada tampoco ayudaron mucho. Sus comandantes los generales Carton de Wiart y Radcliffe se les ocurrió la feliz idea de ir con su coche a la tierra de nadie cerca de Modlin, donde fueron atacados primero por cosacos y después por polacos pensando que eran comisarios bolcheviques, escapando por poco en ambas ocasiones.

En cuanto al resto de los altos mandos de la ayuda militar tampoco es que haya aportado mucho, el general francés Weygand llego a reunirse con Piłsudki para asumir el mando de las tropas polacas el 24 de julio, pero ante la replica del polaco de “¿cuántas divisiones me aporta usted? Desistió de su intento. El problema de Weygand es que sus consejos eran contradictorios, en julio propuso defender la línea del río Bug, para a principios de agosto retirarse al Vístula. Weygand era un general de corte defensivo y eso podía influir en que diera opiniones diferentes, pero también es verdad que no tenía todas las noticias sobre el frente, y eso ayudo a que sus relaciones en el consejo de defensa fueran malas, siendo marginado en las conversaciones ya que se llegaba a hablar solo en polaco en su presencia. Para más Inri, sus relaciones con Rozwadowski, el jefe de esa comisión, eran peores que las que tenía con Piłsudki.

Maximiliane Weygand

Weygand se dedicó entonces a ser asistente de Sikorski, donde le ayudo a ver las ventajas del río Wkra. Con todo esto, y tras volver a ser marginado en la reunión del 18 de agosto, pidió su traslado de vuelta a Paris. Deprimido por todo no entendió porque en Varsovia en su despedida se le condecoro con medalla de la Virtuti Militari el 25 de agosto. Tampoco entendió porque en Cracovia al día siguiente se le agasajo con una cena en el ayuntamiento por parte del alcalde y de la corporación municipal. Y mas extrañado estaría cuando al llegar al Gare l´Est en Paris bandas de música le recibieron y allí mismo el residente Millerand le condecoró con la Legión de Honor. Weygand era el considerado vencedor de la batalla de Varsovia, era el quien había diseñado el plan que triunfo y expulso a los rusos.

La razón de esto es bien sencilla y como siempre es política. Desde el momento en el que la capital estaba a salvo, la prensa del Partido Nacional Demócrata polaco, los enemigos de Piłsudki, a través de su periódico Rzeczpospolita iniciaron la campaña para quitarle méritos al general polaco. Con la campaña de Cud nad Wisla, o milagro en el Vístula, lograron calar la idea en un país católico que gracias a la intervención divina de la patrona y reina de Polonia, la Virgen de Czestochowa, que había confundido con su presencia a los rusos para ayudar a los polacos en la toma de Radzymin se pudo ganar la batalla. Y si Dios intervino en la batalla, difícilmente podría haber sido Piłsudki quien ganara la contienda con sus planes. Por parte del gobierno francés, el hecho de que el embajador polaco en Paris diera la versión de que Weygand había planeado todo les encanto, sino de que coincidiera con un momento patriótico como el de la canonización de Juana de Arco le vino de perlas para una campaña electoral con un uso del catolicismo que les sirvió de mucho.

El milagro en el Vístula

Gracias a esto Francia se había convertido en el protector de Polonia, y daba la imagen de que había hecho mucho más que Reino Unido, teniendo en cuenta además que Llyod George se marchó de vacaciones a Lucerna el 15 de agosto y que no hizo declaración alguna sobre la victoria polaca. Además, curiosamente había logrado salvar una posible crisis ya que los días previos de la batalla se oían rumores de declararle la guerra a Rusia en caso de que Varsovia cayera, y eso provocaría cambios en el gobierno, o incluso del propio gobierno. Curiosamente Lloyd no salvo a Polonia, sino que Polonia le salvo. Irónicamente tendría que dimitir dos años más tarde por algo parecido, la ayuda militar a Grecia en su guerra contra Turquía y también la Home Rule irlandesa.

Otro gobierno que obvio la figura de Piłsudki fue Italia, a través de su presidente Giolitti se felicitó a Polonia por la victoria pero no al general. Estaba claro que nadie fuera de Polonia creía que hubiera sido Piłsudki quien ideara el plan de batalla, se dudaba de su lealtad, nadie lo veía como un patriota polaco, sino como alguien que cambiaba de lealtades para obtener poder, ya que había estado en el partido socialista el cual abandono, y que luchara en la Gran Guerra contra la Entente y ahora estuviera obteniendo su ayuda no gustaba en muchos círculos de poder. Curiosamente Lenin y Lloyd George tenían la misma idea sobre el general Piłsudki, curiosamente el Pravda y el Morning Post compartían temática sobre él.

Por tanto la leyenda de que el plan de batalla fue obra del general francés Weyland y su ejecución de la mano divina calaron pronto. El general francés ayudo voluntariamente a todo ello olvidándose del asunto y negándose a hablar sobre su etapa en Polonia. Solo en sus memorias escribiría al respecto: “La victoria fue polaca, el plan polaco, el ejército polaco”

Tumbas de soldados polacos caídos en lla batalla de Varsovia en el Cementerio de Powązki


jueves, 6 de agosto de 2020

La Guerra Polaco Sovietica III

Si anteriormente habiamos visto como los polacos comenzaban la guerra de buena forma pero se les iba todo al traste, hoy vamos a ver como los rusos dominan la contienda poniendo en apuros a los polacos amenazando con comerse el pais en el verano de 1920

La Guerra Polaco Sovietica

Estrella Roja. El ataque ruso

La toma de Kiev había sido un punto muy positivo para los rusos, no solo era algo muy importante de cara a intentar acabar la guerra civil en la que estaban, sino que habían conseguido dar un golpe moral a los polacos, pero aún quedaba lo más importante, la conquista de Polonia.

Para comandar estos movimientos, se nombró como responsable a Mikhail Nikolayevich Tukhachevsky. Al contrario que algunos de los héroes de la revolución, era de noble cuna, nacido en una familia de la región de Penza, que decían descender de un soldado de Flandes que se había casado con una mujer turca que sirvió al zar. Sea como fuere, se le dio una buena educación, y a pesar de ser parte de la nobleza, su padre era un ateo convencido, y así educo a su hijo, y su interés en la cultura hizo que admirara a Napoleón como ejemplo de gobernante y general. Enrolado como Sargento en el ejército zarista durante la I Guerra Mundial, fue hecho prisionero en la batalla de Lomza, en Polonia, y se le mando al campo de prisioneros de Ingolstadt, en Baviera, donde coincidirá con un tal De Gaulle.

Mikhail Tukhachevsky

A su vuelta a Moscú, se une en abril de 1918 al partido Bolchevique, pero su origen aristocrático hace que sus compañeros no le tengan mucha estima. Es destinado al Volga, donde tras la muerte de su comandante, Muravyov, se hace cargo del I ejército rojo. Sin embargo su gran éxito será con la conquista de Siberia a los rusos blancos de Kolchack en menos de un año. Su idea de que el ejercito rojo formado por proletarios podía conquistar el mundo hace que sea transferido posteriormente al Cáucaso a finales de 1919 y designado para la tarea de coordinar la conquista de Polonia en 1920.

Tukhachevsky se instalará en Smolensk, y ordenara un ataque contra Berezina, esta región, era importante al ser un nudo ferroviario que comunicaba el frente central y sur de la invasión a Polonia. El 15 de mayo las tropas rusas cruzaran el río Dvina, pero el ataque será totalmente infructuoso y deberán de retirarse. Curiosamente, a pesar de todo, el periódico Pravda diría que la ciudad de Borisov no cayo en manos rusas. Si tuvo una consecuencia en las filas polacas, los hombres de Sosnkowski se retirara a Vilna para reforzar la defensa de la ciudad.

Se decidió entonces posponer el ataque, lo que no significo que la propaganda soviética siguiera funcionando a toda marcha, slogans como “esto es una marcha desde la tierra hacia el cielo” eran frecuentes, se llamaba a la guerra, pero se ponía un énfasis total en que no se cayera en el patriotismo, la revolución era internacional y el deber de Rusia exportarla, por eso debía evitarse el chovinismo al máximo decía Lenin. Tal fue así, que hasta Trostky censuro un artículo en el periódico del ejército, Voyennoye Delo, Asuntos Militares, donde apelaba a eliminar el jesuismo de los Lyakhs, un termino peyorativo de para los polacos. Trostky alegaba que el articulo era demasiado patriota. Se abogaba por el uso de términos como guerra contra la Polonia blanca, liberación. Se trataba de que no se viera como una agresión el ataque ruso, incluso Trostky, el 30 de abril había escrito un memorándum de 16 puntos sobre Polonia y su guerra, en el punto 11 dejaba claro que Polonia no debe ser tratada como un asunto similar al de la asimilación de nuevo territorio, sino como si el problema fuera el de una provincia mas de Rusia.

Sería el propio Trostky el que firmaría la propaganda para llamar al alistamiento en el Ejército Rojo: “Se necesitan Voluntarios. ¡Tú, hombre joven del proletariado, campesinos conscientes!. Todos vosotros hombres inteligentes y honorables. Oficiales rusos que entienden que el Ejército Rojo está salvando la libertad e independencia de la nación rusa. El frente oeste os está llamando



¡Cada golpe del martillo es un golpe contra el enemigo!

La propaganda no obstante no solo venia desde Rusia, en Polonia, los miembros del partido comunista mostraban las bondades de la nueva Rusia, y de como se estaba creando una sociedad mejor de la que debían de participar. Todo parecía ya hecho para los rusos, sin embargo, había una figura que dudaba del éxito de la empresa o de que si se lograba conquistar Polonia fuera un asunto fácil de manejar. La voz discordante era el comisario para las naciones, Stalin. El tenia dudas sobre la organización de la logística del ejército y la organización de este, además, le sugería a Lenin que Polonia no debía ser integrada dentro de Rusia, y dejarla integrada en una serie de estados confederados bolcheviques, lo que es más que nada un eufemismo de estados satélite. Sin embargo Lenin decidió más seguir las tesis de Trostky sobre el ataque y desoír a Stalin, y es que uno de los más confiados en la victoria.

En junio llegara a Smolensk la división de hierro del Volga, o Kavkor del comandante Gaik Bzhishkian, alias Ghai. Nacido en Tabriz, Persia, en 1887, era hijo de un socialista armenio exiliado. Vivió en Tiflis donde fue enrolado en el ejercito zarista contra los tucos, y fue doblemente condecorado. Gracias a una estancia en Moscú por estar convaleciente, se enrolo en la guardia roja. Sin embargo fue destinado a Kazakhstan, donde acabo con los contrarrevolucionarios de manera rápida. Desde allí se cruzo medio mundo para estar preparado para la lucha con Polonia. Esta unidad era básica para Tukhachevsky y seria la que atacaría cerca de la frontera con Prusia oriental, y seria útil para cerrar el cerco sobre Varsovia. Todo estaba ya preparado para empezar.

Gaik Bzhishkian

El 2 de Julio Tukhachevsky radiara la orden de ataque, y esta también será impresa en los periódicos y en panfletos:
“¡Hacia el oeste!
Orden a las fuerzas del Frente Oeste
Nº1423    Smolensk    2 Julio
¡Soldados del Ejército Rojo!
El tiempo de atacar ha llegado
El ejército de la bandera roja y el ejército de la depredadora águila blanca se encontrarán frente al otro en combate mortal.
Sobre las cenizas del cadáver de la Polonia blanca se marchará hacia un conflicto mundial.
Nuestras bayonetas traerán la felicidad y paz y trabajo duro de la humanidad
Hacia el oeste
La hora del ataque ha comenzado
¡Hacia Vilna, Minsk y Varsovia! ¡Marchemos!”
Comandante en jefe del frente norte, Tukhachevsky,
Miembros del comité revolucionario de la guerra, Smilga, Unszlicht
Jefe del Staff, Schwarz

El 4 de julio es cuando las primeras tropas empiezan a moverse. El 9 de Julio las tropas de Ghai entraran en Swieciany, y se colocaran a tan solo 72 kilómetros de Vilna. El XVI Ejército cruzara el Berezina el 7 de julio y el III tomara Minsk el 11. En una semana, la primera línea de defensa polaca había caído. Y ahora las fuerzas de Ghai se disponen a atacar Vilna tras unos días de descanso.

La toma de Vilna fue curiosa, en Swieciany, Ghai conoció a un comunista bielorruso llamado Vasya. Este se ofreció a ir hasta Vilna y recopilar información sobre la situación de la ciudad. Infiltrándose en Lituania por los bosques, llego sin ser detectado en ningún momento por las patrullas polacas a la ciudad. Allí, pudo tranquilamente con otros simpatizantes comunistas y soldados en las calles y cafés de la ciudad. Así, recopilo información de cómo estaba defendida la ciudad. Vilna no tenía muy buenas defensas en cuanto a números, aproximadamente 2000 hombres. Para volver a las filas soviéticas, Vasya se agencio un uniforme de soldado polaco y en un transporte de la Cruz Roja Polaca se dirigió a la frontera y de allí vuelta con los hombres de Ghai.

La posición de los rusos en Swieciany estaba siendo comprometida, por lo que tenía dos opciones, atacar o retirarse, y con la información de cómo estaba Vilna, se optó por atacar. Se cruzo el rio Wilja por tres puntos, creando tres flancos de ataque a Vilna, por el suroeste, otro por el norte y otro en el este. Este tridente desoriento a los polacos que no sabían que ataque debía ser parado antes. El general polaco Barszczuk decidió retirarse antes de ser embolsado. Vilna es capturada el 14 de Julio.

Así es como acaban las ideas de los terratenientes

Curiosamente, la ciudad es dada a los lituanos, un gesto diplomático hacia los países bálticos que estaban temerosos de que una vez caída Polonia ellos fueran los siguientes. La caída de Vilna significaba que la segunda línea de defensa había caído y lo peor de una manera rápida. Esto provoca movimientos, los hombres del General Sikorski se moverán hacia el canal del Oginski, y el grupo de reserva de Bialystok se moverán hacia el río Niemen y el río Szczara. Se reforzó con más hombres la fortaleza de Grodno, que era ahora el punto fuerte más al este de Polonia.

Grodno era una ciudad clave, tenía un nudo ferroviario importante y útil para la logística rusa. Pero si Vilna fue una toma fácil, está ya tomo más esfuerzos. Durante una semana los polacos resistieron los ataques rusos, y algunos comandantes rusos llegaron a sugerir que no se atacara más y se decidiera seguir adelante. Esta idea de seguir adelante se vio reforzada cuando los polacos pusieron en liza el 19 de julio los primeros tanques de la guerra. Los modelos Renault causaron miedo en los rusos, y es que el problema como admitiría Ghai en un principio: “Tanques, camaradas, ¿qué podemos hacer con nuestros sables si están hechos de acero? Las bayonetas no sirven, y no podemos acercarnos a ellos”. Curiosamente, a pesar de este miedo, pudieron enfrentarse a ellos. De los 30 tanques que había en Grodno, la mitad habían sido trasladados en tren y no fueron usados, y de la otra mitad, muchos tenían averías que los hacían inútiles y otros fueron atacados y desmantelados en las calles, bien por averías, falta de combustible o destruidos. Solo dos tanques lograron huir. Curiosamente Ghai diría al acabar el día que un tanque no podía hacer nada contra un jinete habilidoso. Parece mentira pero esa visión fue muy popular en muchos oficiales de los ejércitos del mundo durante dos décadas.

Grodno cayó el 23 de Julio, se hicieron unos 5000 prisioneros, y en el último día, según las cifras rusas, unos 300 ulanos polacos fueron muertos y unos 500 se ahogaron en el rio Niemen intentando escapar de los rusos, aunque la cifra parece algo exagerada para la propaganda. Los rusos alcanzaban ahora lo que era la denominada línea Curzon, los límites que las potencias occidentales habían propuesto como mínimo para Polonia. Cruzarla podía ser tomada como una provocación para Europa. Tukhachevsky no dudo, ordeno que se siguiera avanzando y que Varsovia debiera ser tomada el 12 de agosto.
Parecía que los polacos solo retrocedían, pero no era así, la defensa estaba siendo mas dura de lo esperada. Además las partidas de ulanos estaban haciendo daño otra vez como paso en la campana ucraniana. Una de esas partidas derroto a la 15 división de Kurkav en las inmediaciones del rio Niemen, en una de las pocas veces que hubo un duelo genuinamente de caballería. Los polacos salieron victoriosos y dio esperanzas que no todo estaría perdido y que podían luchar. Los rusos se acercaban ahora a la cuarta línea de defensa y esta vez ya seria mas complicado, Situada entre el rio Bug y el Narew el campo de batalla se empezaría a estrechar, tanto por la propia naturaleza del terreno, llena de pantanos y lagos como geográfica, al tener que moverse hacia el sur los ejércitos para evitar la provincia de Prusia.



Una trinchera polaca en la línea de defensa del rio Niemem

El XVI ejercito tardo una semana en tomar Łomza, cerca del paso del rio Narew, siendo tomada gracias al sabotaje interno de los comunistas de la ciudad, y el cruce del rio Bug fue parado por los polacos del general Sikorski, el III ejercito intento cruzar por el centro de la ofensiva el rio pero fue repelido por Sokolow. Mientras, el Grupo de Ghai seguía su exitoso avance a pesar de maniobrar hacia el sur, así tomaron las ciudades de Ostrołęka, y tras derrotar a la caballería del General Roja, tomaran Przasnysz, Biezun y Sierpe, quedándoles el camino libre hacia Torun
Todo estaba saliendo mal para los polacos, y lo que era peor, la moral estaba cayendo por los suelos, Piłsudki diría que la moral de las fuerzas polacas era un caleidoscopio de caos. Aunque también hubo deserciones en el Ejército rojo, en el polaco fueron más numerosas, y es que las noticias del frente podían ser malas si se expandieran sin control. Estas deserciones se debían también a la eficacia con la que la propaganda rusa había calado entre las filas polacas. Muchas de los que transmitían esas ideas de que todo estaba perdido, aun sin querer eran los heridos en los hospitales, y que al volver a las filas en el frente trasmitían la idea de que todo estaba perdido. El general Szeptycki el 2 de Julio reporto desde Minsk que el ambiente no era bueno y que dos barracones del 22 regimiento de Infantería, habían sido fusilados tras una corte marcial por agitación y amotinamiento. Se llegaron a disparar incluso a compañeros de trincheras porque habían saltado hacia tierra de nadie en dirección al Ejército Rojo cantando la internacional como paso el 26 de junio con el 29 regimiento de Infantería.

Detrás del señor polaco hay un terrateniente ruso. ¡Recuerda esto, campesino!

El problema de estas deserciones, es que muchas de ellas no eran por tener simpatía por el comunismo, algunas como la de los regimientos de Poznan o Silesia se debían mas bien a la poca disciplina, y otros como el de las tropas de montaña, los Podhalanski, simplemente querían irse a casa. Muchos soldados habían estado los cuatro años de la Gran Guerra luchando sin parar, por lo que solo querían descansar, y visto que la guerra con Rusia parecía perdida con más motivo. Las retiradas, que eran descritas como un infierno, solo ayudaban a que bajara más la moral y aumentaran las deserciones.
La velocidad del avance militar ruso era la misma que el avance político en los círculos comunistas rusos para organizar el territorio polaco tras la conquista. El 23 de julio en Moscú se decidió formar el Polski rewolucyjny komitet tymczasowy o el Comité provisional revolucionario polaco, o el llamado Polrevkom, con Julian Marchlewski al mando. El carácter de provisional según el propio comité era porque su se transferiría sus poderes al proletariado polaco una vez liberado. En cada ciudad tomada por los bolcheviques se constituía un comité. El 30 de Julio en Białystok se instalarían los cuarteles generales. Desde allí se hará una declaración sobre sus intenciones
“En los territorios polacos libres del yugo del capital, el Comité Provisional Revolucionario polaco, compuesto por los camaradas Julian Marchlewski, Feliks Dzierzynski, Feliks Kon, Edward Prochniak y Jozef Unszlicht ha sido establecido. El comité provisional ha tomado la administración en sus manos, y se ha impuesto la tarea, pendientes de la formación en Polonia de un gobierno de campesinos y obreros, que constituya las bases de la futura Republica Socialista Soviética de Polonia.
Para tal fin, el Comité provisional
a)      Abole el anterior gobierno de la burguesía
b)      Promueve los comités en fábricas y granjas
c)      Creando los comités revolucionarios municipales
d)      Declarando todas las fábricas, tierras y bosques propiedad nacional y administrados por comités municipales y rurales de trabajadores
e)      Garantizar la inviolabilidad de los derechos de los campesinos
f)        Creando órganos para la seguridad suministro y control de la economía
g)      Asegurar la integridad de todos los ciudadanos que sean leales para cumplir las disposiciones y ordenes de las autoridades revolucionarias.”

De las figuras que constituían este comité, es llamativa la de Dzierzynski, se trataba de un polaco nacido en las cercanías de Vilna. Expulsado de la escuela por hablar polaco, siempre fue de un carácter antisocial. Se unió a las filas del Partido Social demócrata polaco y se convirtió en un agitador. Llego a ser cabeza importante del socialismo polaco junto a Rosa Luxemburgo. No tardo en pasar más tiempo en la cárcel que en libertad, incluso fue exiliado a Siberia, y fue en la cárcel donde conoció a su mujer. No solo era un agitador, culturalmente era inquieto, le gustaba tocar el violín recitando versos del poeta Adam Miezkiewicz. Pero lo que le hacía inquietante era que fue el ideólogo del método para limpiar a posibles disidentes y opositores de los bolcheviques, es decir, las famosas chekas. Su imponente figura, de casi dos metros, más el hecho de estar desdentado, según el mismo porque se daba contra los barrotes de la cárcel donde estaba porque los guardias violaban a su mujer y no podía impedirlo, le daban una imagen de crueldad, pero además, el hecho de que nunca se inmutara cuando sus víctimas gritaban durante las torturas le hicieron valedor del mote de Corazón de hierro según los bolcheviques, aunque sus enemigos le llamaban el Sangriento Feliks. Curiosamente Lenin le llama Feliks el de buen corazón. Pero más curioso es que él se viera como un Robespierre moderno, incorruptible y totalmente parcial.

Feliks Dzierzynski

Con este manifiesto, el Comité no solo dejaba claro que Polonia volvería a la órbita rusa, sino que sería como un estado títere, una cosa que luego sería clave para entender las resistencias que se encontraron los rusos más adelante no solo de los soldados polacos, sino de los propios civiles, pues no estaban por la labor de volver a caer bajo el mandato de otro país nuevamente, y menos aún de los rusos. Curiosamente, Stalin ya había advertido de esto.

Pero también había acción en el sur, en la zona de Galitzia, también se estaban disputando combates, aunque eran leves y la invasión rusa no se había producido aún. Lo que si se hizo fue la declaración del Polrekom, que creo la Republica Socialista Soviética de Galitzia o Galitzia radziecka Republika Socjalistyczna. Sin embargo, solo fue un experimento que no paso del ámbito rural, ya que Lwów y Borysław-Drohobych, las zonas más urbanizadas de la región. Curiosamente, el Galrevkom como se denominó al organismo encargado de la zona, declaro el polaco y el yiddish como lenguas oficiales.

Movimientos de los ejércitos en Julio de 1920

Y si en el bando ruso las ideas son claras, en el bando polaco la invasión rusa había provocado un caos político. Si en mayo todo era un camino de rosas, con la mayor preocupación de cómo se realizaría la reforma agraria pues se veían a las fuerzas soviéticas como ya vencidas, ahora era todo un caos. Cuando todo empezó, el periódico conservador, Rzeczpospolita, llamaba a crear un gobierno de unidad. El 23 de junio se le encarga a Władysław Grabski formar gobierno, y cuatro días propone crear el Rada Obrony Panstwa, o Concilio para la Defensa del Estado, con miembros del parlamento, consejo de estado y alto mando militar. Esta quedo constituida  el 1 de Julio. Al mando estaba Piłsudki.

Władysław Grabski

El comité fue una jaula de grillos, Piłsudki estuvo a punto de dimitir, y varios de sus miembros lo hicieron, el problema de este comité es que en su parte política estaba compuesta con todos los partidos de la cámara, y se buscaba por parte de los partidos de la izquierda el intentar imponer su agenda, mientras que los conservadores solo querían el esfuerzo de las clases populares sin que nada cambiara y sin dar nada a cambio por ello. No obstante, milagrosamente el comité logro sobrevivir hasta el fin de la guerra.

Por si fuera poco, aparte de la invasión rusa, vieron como el plebiscito en Prusia del Este, daba un resultado negativo a unirse a Polonia, por lo que seguía siendo Alemania, también el tribunal de arbitraje internacional en Paris repartía el territorio de Techen entre Checoeslovaquia y Polonia, dando la parte más industrializada a los checoeslovacos, dejando a 130.000 polacos al otro lado de la frontera. El golpe era duro, porque Polonia reclamaba esa región en base a su historia y porque además era una zona industrializada y de importantes recursos naturales. 

Pero con todos los golpes recibidos por Polonia, ninguno sería tan duro como el ver que sus aliados internacionales no se querían involucrar en la situación. Francia hacia declaraciones, pero no pasaban mas allá de un simplemente alzamiento de voz sin consecuencias, pero quien más se involucró para no hacer nada fue el gobierno del premier ingles Lloyd. El presidente inglés, en una reunión con el ministro de exteriores polaco Grabski en Spa, en Bélgica, dejaba claro que Polonia debía pactar una paz con Rusia, y ceder ciertos territorios.

El problema que se encontraba Lloyd es que su país no tenía ni los medios ni las fuerzas para ayudar económicamente y militarmente a Polonia, y además era una crisis diferente a la que se encontró anteriormente a cualquier otra, esta vez los implicados no tenían una frontera definida. Por eso la propuesta de Lloyd a Grabski era dejar a arbitraje internacional el destino de los territorios de Vilna, Dánzig y Galitzia. Por supuesto el ministro polaco no acepto la propuesta, retirándose de la reunión con la sensación de que Inglaterra hacia más por los rusos que por su aliado. Tampoco ayudo la declaración de Lloyd de que si Polonia podía defenderse ella sola, para que necesitaba a los ingleses.

Los ingleses sin embargo mandaron una propuesta de paz a los rusos, y les propusieron a los rusos que la frontera fuera la misma que los territorios dominaban los rusos a día 17 de Julio. Curiosamente, no dominaban la zona de Galitzia a pesar de que existía el Galrekom. La propuesta fue rechazada porque los vientos soplaban a su favor, aunque esta propuesta fue rescatada del cajón del olvido para reclamar esos territorios y la soberanía sobre Lwów en el reparto de Polonia en la conferencia de Yalta en 1945.

Polonia, el perro de la entente. Un cartel ruso bastante curioso

El panorama internacional estaba pintando mal para Polonia, además el movimiento obrero internacional estaba aceptando la propaganda del partido comunista británico del Hangs off Rusia. Esta campaña había traspasado las fronteras de la isla y había llegado a los estibadores de Hamburgo. En su manifiesto que encabezaba con el “Proletarios de todo el mundo” calaba rápido entre los simpatizantes comunistas. El manifiesto se tradujo también al francés, y se exporto rápidamente a casi todos los países de Europa, con las excepciones de España y Holanda, y aparte de Polonia, los países que sufrieron el dominio ruso, como Finlandia y los países bálticos y un país que se había librado del bolchevismo como era Hungría. Otras excepciones era los países donde los partidos comunistas no existían, como Noruega, el Vaticano y Albania.

No solo los británicos y franceses estaban preocupados por lo que podía pasar con Polonia y Rusia, los vecinos polacos también estaban atentos a lo que ocurría en la contienda. Rumania estaba interesada en lo que podía ocurrir, no solo compartía frontera con ambos países, sino que tenía un territorio en disputa con Rusia, Moldavia, y estaba en disputas con Hungría por Transilvania. El miedo rumano era que el expansionismo bolchevique les afectara y que acabara todo con un ataque de los húngaros para recuperar sus territorios.

Hungría era el país que mejor entendía a Polonia, no solo la amistad ancestral entre ambos países les unía, sino que el almirante Horthy, el regente del país, había derrotado el avance de los soviéticos de Bela Kun y su régimen de terror rojo por Hungría. Los húngaros no solo daban prioridad a los convoyes de material que procedían de la denominada vía griega, incluso llego a reclutar a una serie de voluntarios para luchar por Polonia. Sin embargo todo esfuerzo fue parado en la frontera de Checoeslovaquia y ninguna ayuda húngara o desde el sur pudo llegar a Polonia.

Checoeslovaquia es el país más contradictorio de todos los implicados. Mientras en el parlamento se condenaba el ataque ruso, su gabinete de gobierno negociaba con los rusos para tener unas buenas relaciones entre ambos países. El partido comunista checo era legal y se les dejaba participar sin problemas de la vida política. Otra situación ambigua fue la no intervención gubernamental para parar las huelgas de ferroviarios en las líneas de suministros que venían desde Grecia y Austria. Solo cuando Polonia corto el suministro de petróleo desde Lwów y la intervención de los eslovacos para controlar las huelgas y detenciones de agitadores soviéticos el gobierno de Praga permitió el paso de suministros. El 9 de agosto se hizo una declaración de no intervención y neutralidad respecto del conflicto. Al gobierno de Masaryk se le acusaría de complicidad con los rusos, no obstante era socialista, y ya había retenido en junio la vuelta del ministro exteriores polaco a Polonia durante 4 días en Praga por problemas con las vías de tren. También se rumoreo que todo esto era debido a que los checoeslovacos querían intercambiar terrenos de Rutenia por territorios polacos, espacialmente Techen, la cual había sido repartida entre polacos y checoeslovacos.

Tomas Masaryk

Alemania fue un caso curioso también en este conflicto, marcado objetivo del Ejército Rojo y Lenin. Con todos los problemas internos de Alemania, que bordeaban el caos total, solo la aparición de los Freikorps parecía que ponía las cosas en su sitio. Pero en cuestiones de política exterior se encontraba atada a la tutela de lo que dijeran los aliados. Sería el ejército, el Reichswehr, quienes tendrían más iniciativa en cuanto al conflicto. El general alemán Seeckt proponía al ministro de exteriores alemán, Maltzan que negociara con los rusos para la devolución de Poznania. Aunque no se llegó a tratar el tema, pero si se establecieron conversaciones entre alemanes y rusos.

Ludendorff también aparecería por esta situación, llegando a proponer a los ingleses una fuerza de Freikorp para ayudar a Polonia a cambio de la devolución de Poznania. Pero su propuesta fue rechazada de plano por todas las fuerzas políticas, y es que el gobierno alemán prefería conservar Silesia antes que Poznania con ayuda de las fuerzas paramilitares. De hecho, en agosto, mientras se libraba la batalla de Varsovia, los alemanes se vieron obligados a mandar a los Freikorps para conservar estos territorios.



Medalla de los Freikorps que defendieron Silesia

Cosa distinta era ya Prusia Oriental, aquí el referéndum para saber si se unían a Polonia o seguían siendo alemanes se decanto con un enorme resultado a favor de lo segundo. Lógicamente la situación de Polonia influyo, aparte de que la zona era de mayoría alemana. Sin embargo para Alemania se le presento un problema porque la evacuación de las tropas inglesas que vigilaban el referéndum se hizo a la máxima velocidad posible. Los ingleses tenían miedo de que las tropas irlandesas allí destinadas, pudieran “contaminarse” por contacto con los bolcheviques, ya que consideraban a los nacionalistas del Sinn Fein un peligro si contactaban con este tipo de ideas. Por tanto, era otro punto a favor de no mandar las tropas de Ludendorff a Polonia, se necesitaban para proteger esta provincia también.


Y para Alemania otro punto era Danzing, la ciudad había sido declarada ciudad libre según el Tratado de Versalles, a pesar de que la administración debía ser de la Sociedad de Naciones, en realidad se cedió a Polonia. Tenemos un problema, porque una ciudad alemana, quedaba bajo administración polaca y aislaba a Prusia Oriental del resto del país. Danzing era el único puerto para Polonia, y cuando los estibadores, agitados por los comunistas, se pusieron en huelga desde el 15 de julio hasta el 24 de agosto cortaron una de las vías de aprovisionamiento fundamentales para el ejército polaco. El problema de la ciudad libre de Danzing se extendería en el tiempo, no solo para Polonia y Alemania acabando como acabo como una de las causas de una guerra, sino que para Polonia se convirtió en un pozo de dinero para el presupuesto militar al querer construir un nuevo puerto en la vecina localidad de Gdynia.

La situación no pintaba nada bien para Polonia, su terreno estaba siendo fagocitado por Rusia, la cual no quería parar en ningún momento su marcha, y desoía a las potencias europeas de que llegase a la paz. Parecía que los rusos no querían parar, ya que el ejército de Ghai se encontraba a solo 10 días de Berlín, tanto había sido su éxito por su parte en la invasión, que había ya sobrepasado Varsovia en su trayectoria. No obstante, la primera semana de agosto se mostro crucial en la guerra, la toma de posiciones defensivas por los polacos para proteger su capital se mostraría como el punto decisivo de la guerra

Heroes, hacia Varsovia